Mejora tu estado de ánimo y sobrelleva los momentos difíciles en el trabajo.
Publicado por INSPIRA, 7 de julio de 2021. Revisado 28 de abril de 2023.
La felicidad laboral no necesariamente significa forzar la alegría, sino encontrar un momento de calma interior o tiempo para ti mismo en medio de tu ajetreado día.
La felicidad en el ámbito laboral puede significar muchas cosas diferentes para diferentes personas. Y si no sabes lo que debería ser para ti, pregúntate: "¿Cómo me gustaría que corran mis días?".
Permítete unos segundos para soñar despierto y posiciónarte en un día normal de trabajo ¿Cómo se ve? ¿Con quién estás interactuando? ¿Cómo empieza o culmina tu día?
El objetivo es encontrar formas de reducir los sentimientos de estrés, ansiedad y bruma que muchos experimentamos durante la semana pero que no siempre sabemos manejar. Aquí nuestros profesionales en salud mental te comparten algunas ideas a probar:
1. Reclama tu tiempo realizando una actividad que te guste hacer antes o después de trabajar
Nuestros expertos en salud mental recomiendan comenzar o terminar tu día con una actividad significativa y centrada en ti, como lo es el yoga, la meditación, escribir un diario o tomar una clase. Esto, te ayudará a sentirte más en control de tu tiempo y no sumergido en las demandas laborales. Puede además minimizar el agotamiento laboral, así como aumentar tu bienestar, motivación y disfrute del trabajo.
Ten en cuenta que lo que es una actividad nutritiva para otros no necesariamente lo será para ti. Para algunas personas, sentarse quietos, apagar cualquier sonido o luz, puede ser cómodo. Para otras personas, esto podría ser absolutamente aterrador. Tal vez eres alguien que necesita moverse, ser activo, y eso es algo que te relaja o te tranquiliza. Quizás para algunas personas, su actividad de preferencia podría ser tomarse un té o compartir con seres queridos.
2. Pon en perspectiva el estrés de los contratiempos que puedan surgir, como los retrasos por el tráfico.
Algunas días pueden ser menos ideales que los demás. Puede haber tráfico sin un final a la vista, y una reunión a la que llegarás tarde como consecuencia. Cuando empieces a sentirte abrumado(a) por los contratiempos que la vida inevitablemente te presentará, tómate un momento para respirar.
Uno o dos minutos de respiración controlada pueden restablecer tu sistema nervioso y ayudarte a recuperar algo de calma y compostura. Otro ejercicio que puedes hacer es escribir tus frustraciones en un papel. Luego, romper el papel y botarlo, utiliza este gesto como un símbolo para poder seguir adelante y continuar con tu día.
3. Crea límites entre tú y los hábitos matutinos que te agotan
Observa aquellas tareas laborales que contribuyen a tu estrés diario. Para algunos, esto puede ser revisar los correos electrónicos o realizar llamadas telefónicas a primera hora de la mañana. Si agarrar tu teléfono o encender tu computadora por las mañanas son cosas que provocan que te día no corra como te gusta, considera cómo puedes dividir la tarea en plazos y ajustar tus horarios para que la actividad sea menos abrumante.
Por ejemplo, si sabes que revisar tu correo electrónico es estresante por las mañanas, intenta responder solo aquellos mensajes que sean de suma importancia y deja el resto para más tarde en el día. De esa forma, habrán una o dos actividades que te separarán de la tarea que no te gusta. El objetivo es crear un amortiguador entre las actividades que consumen tu energía y las que te dan motivación y fuerza para completar tu día.
4. Toma en cuenta las señales de tu cuerpo
Si te notas tenso en el trabajo, tómate un momento para cuidar tu cuerpo y ayudarlo a relajarse. ¿Sientes tensión en tus hombros? ¿Estás apretando la mandíbula? Cuando conoces los signos de estrés y tensión en tu cuerpo, puedes practicar ser consciente de eso y crear una rutina para ti. Por ejemplo, practica tensar y relajar los músculos por periodos cortos de tiempo o da un paseo corto al aire libre, estas son dos formas que puedes abordar la tensión física y recuperar tu energía.
5. Reconoce que la felicidad no necesariamente vendrá de tu trabajo
Es útil considerar de dónde crees que obtienes tu felicidad. Es posible que la estes buscando en los lugares equivocados. El trabajo no tiene por qué ser lo que contribuya a tu felicidad. Al contrario, pueda ser que tú tengas que llevar la felicidad al trabajo.
Para esto se requiere un cambio de mentalidad que nos permita ampliar nuestras definición de lo que es felicidad. Aprender a sentirse bien por uno mismo nos enseña a no depender de fuerzas externas, como un trabajo, para ser feliz. Y esa es una lección importante que te ayudará dentro y fuera del trabajo.
Mientras tanto, existen otras cosas, un poco más concretas, que te pueden ayudar a llevar la felicidad al trabajo y asegurarte de que sea un lugar más positivo. Estas incluyen:
Evita generar o regar rumores en el lugar de trabajo
Concéntrate en ayudar a tus colegas en lugar de competir con ellos
Intentar redirigir las conversaciones negativas y trabajar activamente para resolver los problemas que se presenten a diario.
Si descubres en el proceso que ciertas personas en el trabajo te deprimen o que intentan involucrarte en comportamientos tóxicos, has todo lo posible por distanciarte de ellas.
Encuéntrale el valor a tu trabajo
Una forma de sentirte mejor con tu trabajo es buscar cómo tus esfuerzos marcan la diferencia. Algunas formas en las que puede encontrar significado en tu trabajo incluyen:
Construir relaciones positivas con tus compañeros de trabajo y clientes.
Centrarte en algunas de las razones por las que trabajas, tales como mantener a tu familia y ahorrar para el futuro
Pensar en las formas en que tu trabajo beneficia a tu comunidad
La realidad es que muchas personas enfrentan períodos de insatisfacción con su trabajo. por lo que encontrarle significado a tu trabajo no se trata de hacer algo para cambiar el mundo. Se trata de encontrar una manera de contribuir; a tu familia, a tu comunidad o a la sociedad, que te deje con un sentido de realización y propósito.
Te podemos ayudar
Incluso si tu objetivo final es pasar a una posición o carrera más deseable, hay cosas que puede hacer ahora para lograrlo. Por ejemplo, si dejar tu trabajo actual no es una opción en este momento, o si no puedes controlar a tus compañeros de trabajo para que el ambiente laboral no sea uno tóxico, puedes trabajar en desarrollar estrategias para controlar cómo reaccionas ante estas situaciones. Para ello, lo recomendable es hablar con un terapeuta, un profesional de la salud mental. Este te puede ayudar a encontrar formas de sentirse mejor con tu trabajo y a su vez sentirte más feliz, saludable y satisfecho.
En INSPIRA, contamos con psicólogos, psiquiatras, consejeros y trabajadores sociales.
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